Breve época dorada

A mediados de los 80, Puerto de Sagunto conoció un inesperado y, por desgracia, breve renacer en lo tocante a locales de proyección: a los únicos supervivientes de esa década, el Oma y el Avenida, se sumaba un restaurado Salón Victoria, ahora rebautizado como Casa de Cultura. A su cargo, la Fundación de Cultura del Ayuntamiento, que, coordinada —si no nos equivocamos— con la Filmoteca Valenciana, nos ofreció durante algún tiempo excelentes ciclos dedicados a directores consagrados o a géneros específicos: entre unos y otros podemos recordar los de Charles Chaplin, Woody Allen, Stanley Kubrick, cine de terror o cine erótico. Las proyecciones se ofrecían los viernes por la noche, por lo que el aficionado porteño, insistimos, tenía a su disposición tres programaciones diferentes cada fin de semana si sumamos las de los cines comerciales habituales antes mencionados. En Sagunto se proyectaban también los mismos ciclos, veinticuatro horas más tarde, en el Musical.

Para los amantes del 7º Arte fue un auténtico lujo poder revisitar o descubrir auténticas joyas del cine clásico por todo lo grande durante esta inolvidable etapa dorada, casi se puede decir que el otoño de las salas de proyección de nuestra ciudad. La Casa de Cultura seguiría proyectando películas durante algunos años más, aunque esta vez ya se trató de títulos más actuales. Tristemente, a finales de la década mencionada, no sólo ya no podríamos disfrutar de esta privilegiada y especial programación, sino que nos habrían abandonado para siempre el Avenida, el Terraza Nit, el Musical y el Casablanca.

La pantalla del centenario Salón Victoria, por suerte, ha vuelto a brillar en tiempos recientes gracias a la iniciativa de la Asociación Cultural Nautilus y de la Fundación de Cultura del Ayuntamiento, pero de eso hablaremos en otra ocasión… 

Ciclo Stanley Kubrick (abril-mayo de 1988)